lunes, 28 de febrero de 2011

LA VIDA EN EL ALAMBRE


Parece que la Liga Española quedó sentenciada el pasado sábado. Una Liga BBVA que sigue el guión esperado, un dejà vú con el Barcelona 7 peldaños por encima del Real Madrid en la escalera del estilo y la regularidad.
Así las cosas, las 4 primeras plazas de la tabla clasificatoria (Barcelona, Madrid, Valencia y Villarreal) difícilmente van a sufrir alguna variación de aquí al mes de mayo. Los 3 puestos para la Europa League (dado que el vencedor de Copa del Rey accederá por méritos propios a Champions League) aún no tienen dueños claros. Espanyol y Athletic resisten en lo alto de la tabla, mientras At.Madrid y Sevilla siguen en esa incesante lucha contra sí mismos por colarse en Europa por la puerta de atrás, como mal menor.

A partir de este momento, mi interés por la Liga se traslada a las catacumbas, el sótano balompédico, la parte baja de la clasificación, la sombra del descenso. La incómoda situación de La Vida en el Alambre, de saber que no hay margen para el error.
Cambios de entrenador, fichajes de invierno, campañas de apoyo al equipo,... medidas que alumbran el mazazo que supone para un equipo abandonar la Primera División.

Curiosamente, hay 2 equipos que comparten algo más que ese sufrimiento: Han apostado por delanteros jóvenes, ídolos en sus países de origen, que han asumido grandes responsabilidades a edades tempranas.

1. CAICEDO, UN NÓMADA DEL GOL

A principio de temporada, el Levante UD era mi candidato número uno al descenso. Un equipo plagado de descartes de otros clubes (Valdo,Sergio, X.Torres, Juanfran, Del Horno,...), la columna vertebral del reciente ascenso (Ballesteros, Iborra, Xisco,...) y algún refuerzo interesante (Stuani).
A falta de una hora para el cierre del mercado, el destino dio un giro inesperado. El Manchester City dio el visto bueno a la cesión de Felipe Caicedo (Ecuador, 1988)al conjunto granota. Tercera cesión consecutiva para el ecuatoriano, lejos de los planes petromillonarios de los SkyBlues.
Sobre la bocina aterrizó el fornido ariete en el Ciutat de Valencia, en un desesperado intento por volver a ocupar las portadas de antaño. Si el Levante está resistiendo, es en gran parte por los goles (9 acumula ya) de Caicedo, un delantero con un físico privilegiado.
Potente en la zancada y brillante en la definición, el '25' granota se exhibe con espacios. En Ecuador, los aficionados suspiran con la inminente recuperación de Luis Antonio Valencia (ManUtd.) y saborear esa dupla atacante de lujo.

2. LA RESPUESTA DE RONDÓN

El pasado verano, llegó a la Costa del Sol un jeque que hizo soñar a la afición malaguista. Se pedían fichajes de relumbrón, estrellas consagradas. Sin embargo, se hizo un esfuerzo por retener a los buenos (Duda, Eliseu, Wellington, Apoño, Fernando,...) y fomentar el trabajo de cantera.
Muchos quedaron decepcionados al conocer el nombre del que debía ser la referencia ofensiva del equipo: Salomón Rondón (Caracas, 1989). El fichaje más caro de la historia del club provenía de la Segunda División (Las Palmas), y fue acogido con escepticismo en La Rosaleda.
En invierno han llegado Pellegrini, Maresca, Baptista, Camacho y DeMichelis, pero es el venezolano quien mantiene al Málaga con opciones.
Los centros laterales de Duda y Quincy encuentran su destino en la cabeza de Rondón, un especialista en el juego aéreo. Enemistado con la posesión estéril, el delantero boquerón sólo concibe el fútbol como herramienta para desequilibrar a los centrales adversarios: carrera a los espacios libres que dejan los centrales o juego de espaldas y apertura a las bandas para rematar. 9 dianas le avalan.
Miku-Arango-Rondón, un tridente para asaltar la próxima Copa América.

Rondón y Caicedo: delanteros corpulentos, potentes y con facilidad anotadora. No serán portada de los grandes diarios ni abrirán los bloques de deportes de ninguna gran cadena televisiva, pero son vitales para sus equipos (tanto o más que los sobre-mediatizados cracks de primer nivel). Sin ellos, Málaga y Levante se verían abocados al infierno de la 2a División.
Ambos han dado la victoria a sus equipos la pasada jornada, con goles decisivos ante rivales directos. Levantinos y malacitanos sueñan con la permanencia.

QUE SEAS PEQUEÑO NO QUIERE DECIR QUE NO PUEDAS HACER COSAS GRANDES.

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